Los vapeadores, también conocidos como cigarrillos electrónicos, funcionan mediante la vaporización de un líquido que contiene nicotina y otros componentes, como saborizantes y propilenglicol, en lugar de quemar tabaco como los cigarrillos tradicionales.
En su interior, los vapeadores tienen una batería, un atomizador y un depósito de líquido.
La batería alimenta el atomizador, que calienta el líquido hasta convertirlo en vapor que se inhala a través de la boquilla del dispositivo.
Al inhalar el vapor, la nicotina se absorbe a través de los pulmones y llega al torrente sanguíneo, proporcionando una sensación similar a la de fumar tabaco.
Los saborizantes y otros componentes añadidos al líquido también pueden contribuir al sabor y a la experiencia de vapeo.
Es importante tener en cuenta que aunque se cree que los vapeadores son menos dañinos que fumar tabaco, todavía pueden presentar riesgos para la salud y no son una alternativa saludable a dejar de fumar por completo.
Por estas razones los vapeadores dañan la salud
Aunque los vapeadores se han promocionado como una alternativa más segura al tabaco, todavía hay preocupaciones sobre su seguridad y los posibles efectos a largo plazo en la salud.
A continuación de señalan algunas razones por las que los vapeadores pueden ser dañinos:
- Nicotina: La mayoría de los líquidos de vapeo contienen nicotina, una sustancia adictiva que puede aumentar la frecuencia cardíaca y la presión arterial, lo que puede aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Además, la exposición a la nicotina durante el embarazo puede aumentar el riesgo de complicaciones en el feto.
- Productos químicos tóxicos: El líquido de vapeo puede contener productos químicos tóxicos, como formaldehído y acroleína, que son conocidos por ser carcinógenos. La exposición a estos productos químicos puede aumentar el riesgo de enfermedades respiratorias y cáncer.
- Partículas finas: El vapor de los vapeadores contiene partículas finas, similares a las que se encuentran en la contaminación del aire. Estas partículas pueden penetrar profundamente en los pulmones y causar inflamación y daño pulmonar.
- Riesgos para los jóvenes: Los vapeadores pueden ser especialmente peligrosos para los jóvenes, cuyos cerebros todavía están en desarrollo. La exposición a la nicotina puede afectar la memoria, la atención y el aprendizaje.
En general, se necesita más investigación para determinar completamente los riesgos a largo plazo del vapeo.
Sin embargo, los expertos coinciden en que los vapeadores no son una alternativa saludable al tabaco. Por ello es importante que los fumadores que buscan dejar de fumar hablen con su médico para encontrar el mejor plan para ellos.
Vapeadores, un reto para la salud pública
Las académicas Ana Beatriz Moreno Coutiño y Guadalupe Ponciano Rodríguez, de las facultades de Psicología y Medicina de la UNAM, coincidieron en que, a pesar de no haberse resuelto el problema del consumo de tabaco, ahora nos enfrentamos a un nuevo problema de salud pública generado por las compañías tabacaleras.
Estas tienen una influencia significativa y la capacidad de diversificar sus productos, señalaron durante la conferencia “Los vapeadores en México, en el marco del Día Mundial sin Tabaco”.
Moreno Coutiño advirtió que las campañas de promoción de los vapeadores y cigarrillos electrónicos están dirigidas a los adolescentes, una población vulnerable y atractiva para el mercado.
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Este tema es particularmente grave en México, donde una encuesta de la Comisión Nacional contra las Adicciones (2022) encontró que 975 mil personas entre 12 y 65 años usan vapeadores o cigarrillos electrónicos, y cinco millones los han utilizado al menos una vez.
Moreno Coutiño señala que la edad de primer contacto de los niños con el tabaco es a los 10 años
Mientras que con los cigarrillos electrónicos el patrón es similar, comenzando su consumo a partir de los 12 años.
Estos dispositivos contienen nicotina y otras sustancias, como cannabinoides, y son fácilmente accesibles. Se pueden conseguir en puestos callejeros, máquinas expendedoras ubicadas en centros comerciales y en plataformas de envío de alimentos, a pesar de que su venta es ilegal en el país.
La especialista también señaló que el costo de los cigarrillos electrónicos es bajo, oscilando entre 180 y 270 pesos. Esto permite que los menores los adquieran con relativa facilidad.
Además, la variedad de sabores, olores dulces y formas atractivas, como bolígrafos o memorias USB, hace que los consumidores no perciban los peligros asociados con su uso.
El “vapor” que emiten estos dispositivos es en realidad un aerosol. El cual contiene sustancias como el propilenglicol y la glicerina vegetal, que pueden irritar las vías respiratorias. También pueden contener formaldehído, una sustancia conocida por ser cancerígena si el líquido se sobrecalienta.
La experta afirmó que nos encontramos ante una industria poco ética que está incorporando nuevas sustancias sin conocer plenamente su impacto en el mercado.
Algunos de estos químicos emulan la actividad de cannabinoides. Y quienes los consumen están siendo utilizados como “conejillos de indias” para productos muy baratos, principalmente de origen chino.
¿Los vapeadores y cigarrillos electrónicos ayudan a dejar de fumar?
Aunque los cigarrillos electrónicos o vapeadores se han promocionado como una alternativa menos dañina que los cigarrillos tradicionales y como una herramienta para ayudar a las personas a dejar de fumar, la evidencia científica sobre su efectividad es limitada y controvertida.
Algunos estudios sugieren que los vapeadores pueden ser útiles para reducir el consumo de cigarrillos tradicionales, pero no necesariamente para dejar de fumar por completo.
Otros estudios sugieren que los vapeadores pueden aumentar el riesgo de recaída al tabaco y el consumo de nicotina en personas que ya han dejado de fumar.
Además, es importante destacar que los vapeadores también pueden tener efectos negativos en la salud. Como problemas respiratorios, daños en los pulmones y riesgo de adicción a la nicotina.
Por lo tanto, se recomienda que las personas interesadas en dejar de fumar busquen ayuda de profesionales de la salud. Ellos le pueden brindar asesoramiento y tratamiento efectivo para superar la adicción al tabaco.
