Día Mundial del Agua ¿Por qué la ganadería acaba con el agua del planeta?

Impacto de la ganadería en el consumo de agua
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El próximo 22 de marzo se celebra el Día Mundial del Agua, fecha para crear conciencia sobre la importancia del agua dulce y promover la gestión sostenible de los recursos del líquido en todo el mundo.

Asimismo, la fecha busca  promover la cooperación internacional en la gestión de los recursos hídricos, especialmente en regiones donde el acceso al agua es limitado o donde el agua es un recurso compartido.

Impacto de la ganadería en el gasto de agua

La ganadería es una actividad que requiere grandes cantidades de agua, tanto para el consumo directo de los animales como para la producción de alimentos para el ganado, como el pasto y los cultivos forrajeros.

Por esta razón es que la ganadería tiene un impacto significativo en el consumo de agua en todo el mundo.

De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la ganadería es responsable del uso del 8 por ciento del agua dulce del mundo.

Esta cifra puede variar dependiendo de las prácticas de manejo del ganado y el tipo de producción ganadera.

⇒LEER TAMBIÉN: Día Mundial del Agua ¿Qué es la huella hídrica?

Además, la producción de carne y productos lácteos es más intensiva en agua que la producción de cultivos vegetales, lo que significa que se necesita más agua para producir un kilo de carne que para producir un kilo de cereales o legumbres.

En este sentido, la FAO señala que se necesitan alrededor de 15 mil litros de agua para producir un kilogramo de carne de res, mientras que se necesitan solo mil 250 litros de agua para producir un kilogramo de trigo.

El impacto de la ganadería en el consumo de agua puede tener consecuencias para la disponibilidad de agua dulce en muchas partes del mundo, especialmente en regiones con escasez de agua.

Por lo tanto, es importante considerar la eficiencia del uso del agua en la producción ganadera y promover prácticas más sostenibles en la producción y consumo de productos de origen animal.

Otras afectaciones de la ganadería en el agua

En 2019, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), señaló que dos tercios de la población mundial padecen escasez grave de agua al menos durante un mes al año.

Agregó también, que dos millones de personas viven sin agua potable en sus hogares. Y más de 700 niños menores de cinco años mueren al día de diarrea a causa del agua insalubre.

Y es que los efectos de la ganadería en el agua no afectan únicamente al gasto sino también a su contaminación.

La industria porcina, por ejemplo, produce quince veces más excrementos que carne.

Ese estiercol cargado de nitrato es el responsable de la contaminación de los sistemas acuáticos de agua dulce y salada.

Los excrementos, también llamados purines, se almacenan en balsas y se utilizan para fertilizar el suelo agrícola. Pero la tierra tiene una capacidad limitada para absorber los nitratos que contienen.

Cuando este exceso de nutrientes; nitrato y fósforo principalmente, llega al mar, altera el ecosistema causando zonas muertas o hipóxias.

De acuerdo con Greenpeace, las zonas muertas en los océanos han aumentado un 75 por ciento desde 1992. En la actualidad hay más de 600 sistemas documentados.

De esta forma, mientras la industria ganadera usa y contamina el agua de forma desproporcionada, el uso inteligente de los recursos hídricos es más necesario que nunca.

¿Cómo mitigar el impacto de la ganadería en el uso y distribución del agua?

Un análisis de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), sobre los impactos económicos, sociales y ambientales de la expansión ganadera en México, identifica múltiples y efectivas opciones de mitigación.

Advirtiendo que ir más allá del estado actual requiere de un fuerte compromiso de política pública.

El mayor reto, señala el documento, es que las opciones no son neutrales en costo. Y los productores más pobres, los que apenas obtienen un sustento marginal de los sistemas extensivos, que son los que generan la mayor parte de las emisiones, carecen de fondos para invertir en cambios.

Opciones de mitigación

a) Mitigación de CO2:

I) Reducción de la deforestación intensificando la agricultura;

II) Restauración de la materia orgánica en suelos mediante diversas técnicas: agricultura orgánica, labranza de conservación, etc.;

III) Reversión de la pérdida de carbono orgánico en suelos con pastizales degradados

IV) Secuestro de carbono por agroforestería.

b) Mitigación de Metano (CH4):

I) Dietas más eficientes para reducir la fermentación entérica

II) Mejor manejo de excretas en los sistemas intensivos y producción de biogas.

c) Mitigación de Óxido Nitroso (N2O) y de Amoníaco (NH3):

Al reducir el N contenido en las excretas con una mejor eficiencia en la asimilación animal del N y con un mejor manejo de excretas. Gran parte del reto de reducir las emisiones de N2O y de NH3 recae en los agricultores.

Los impactos de la ganadería en detrimento y contaminación del agua es sustancial.

Estos impactos deben verse desde una perspectiva de cadena. Que vaya desde la producción de insumos y pastos para la alimentación animal hasta la transformación de productos animales.

Se parte de que el agua es un elemento indispensable e insustituible para la supervivencia de los animales y que tiene un efecto radical en los niveles de producción.

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