El origen del peso, la moneda mexicana oficial, se remonta a la época de la Conquista, cuando los pagos se realizaban “al peso” de una unidad de metales, por lo que se necesitaba una balanza para hacer la medición.
La moneda que se acuñó por primera vez en México en 1536 era de plata y equivalía a ocho reales. Pesaba una onza (27 gramos) y estaba fabricada con un 92% de plata pura.
Este peso circuló en las colonias españolas de América y se convirtió en una de las monedas más importantes de la época.
El peso fue acuñado por primera vez en la primera Casa de Moneda en América, la cual fue fundada en 1535.
La unidad más común era el castellano o también llamado “peso de oro” o simplemente peso.
El “peso de a ocho” tenía la mitad del valor del castellano y estaba fabricado de plata.
¿Cuándo nació el peso mexicano?
Durante mucho tiempo, la moneda oficial en México fue el real y el escudo, y no fue sino hasta la llegada de Maximiliano de Habsburgo al poder que se emitió el peso mexicano y su sistema decimal.
De acuerdo con la “Historia de la moneda y del billete en México”, del Banco de México (Banxico), la emisión del peso fue una de las primeras acciones de Maximiliano como gobernante, quien fue proclamado emperador de México en 1864 a propuesta de Napoleón III.
El peso fue la primera moneda acuñada en el país bajo el sistema decimal y es considerado un elemento muy importante en la historia económica de México.
Según Popular Science, el peso mexicano fue la primera moneda en el mundo que utilizó el símbolo $, incluso antes que el dólar estadounidense.
Antes de la llegada del peso, el dólar español, también conocido como “spanish dollar”, se convirtió en la moneda de curso legal en los Estados Unidos durante más de 70 años, desde 1785 hasta 1857.
Con la llegada de Benito Juárez al poder y ante la suspensión del pago de la deuda externa de México, Napoleón III encontró la justificación para la Intervención Francesa.
Aprovechando el apoyo de grupos conservadores, colocó al príncipe austriaco Maximiliano de Habsburgo frente al gobierno mexicano.
A la caída del segundo Imperio, con la restauración de la República bajo el mando de Benito Juárez, se continuaron acuñando pesos de oro en denominaciones de 20, 10, 5, 2.5 y 1 peso.
El gobierno de Juárez también acuñó monedas de plata de 1 peso, 50, 25, 20, 10 y 5 centavos. En el anverso tenían el escudo nacional y la leyenda República Mexicana.
Los pesos juaristas tenían en el reverso, de la mitad hacia abajo, una balanza que representa al poder Judicial con la palabra LEY, al fondo una espada cruzada que representa al poder Ejecutivo, y en el margen inferior la denominación con letras.
Este tipo de monedas se acuñó de 1869 a 1905, con algunas interrupciones.