El origen de las piñatas podría estar en el otro lado del mundo

Conoce el origen de las piñatas
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La temporada navideña está cargada de tradiciones, como es el caso de las posadas, las cuales a su vez, van de la mano con las piñatas, que sin importar lo que contengan en el interior, siempre son motivo de fiesta y algarabía.

Fue en el siglo XVI, cuando se tienen los primeros registros de ellas, las cuales estaban hechas de 7 picos, montados sobre una olla de barro.

¿Dónde se originaron las piñatas?

Existen dos versiones sobre su origen, la primera de ellas se remonta a la antigua China, en específico a Los viajes de Marco Polo.

Se cuenta que el mercader en una de sus travesías por Asia, observó cómo se rompía una figura de buey relleno de semillas para celebrar el Año Nuevo Chino.

Esta tradición fue llevada hasta Italia, donde se adaptó para conmemorar la cuaresma, de ahí se pasó a España y, finalmente, los españoles se encargaron de traerla al Nuevo Mundo y dar un nuevo significado a las piñatas.

Mientras que una segunda versión señala que estos objetos pertenecían a la civilización maya, ya que ellos practicaban un juego con los ojos vendados, el cual consistía en colgar con una cuerda una olla de barro llena de cacao y tratar de romperla.

⇒LEER TAMBIÉN: ¿Cuándo inician las posadas y qué significan?

Y a la llegada de Hernán Cortés a México, las piñatas adquirieron un nuevo significado religioso, el cual usaron como recurso para la evangelización.

Al principio se hacía con una olla de barro y se le añadían siete picos para darle forma de estrella.

¿Qué significan los 7 picos de las piñatas?

Las piñatas solían tener 7 picos, los cuales representan los siete pecados capitales:

  1. Pereza
  2. Gula
  3. Envidia
  4. Ira
  5. Lujuria
  6. Avaricia
  7. Soberbia

Mientras que el palo que se usa para golpear la piñata simula la fuerza con la que se destruye el mal, la falsedad y el engaño.

La venda para cubrir los ojos, mientras se busca golpear a la piñata, representa la fe ciega en Dios.

En tanto que los colores llamativos con los que se adorna, hacen referencia a las vanidades del mundo y las tentaciones del demonio.

Se dice que la primera posada con piñata, ocurrió en el entonces Convento de San Agustín en Acolman, estado de México, muy cercano a la zona arqueológica de Teotihuacán.

Fue el superior del convento, Fray Diego de Soria quien obtuvo del papa Sixto V el permiso de celebrar en la Nueva España las llamadas “misas de aguinaldos”, del 16 al 24 de diciembre.

¿Cuándo comienzan las posadas?

Las posadas son 9 y la primera se realiza el 16 de diciembre, mientras que la última se celebra el 24 de diciembre, día del nacimiento de Jesús.

Cada uno de los nueve días representa un valor como humildad, fortaleza, desapego, caridad, confianza, justicia, pureza, alegría y generosidad.

Marisol Tarriba explica en su artículo “Las posadas en 1894 y 1895: Una tradición religio-terpsicorea” que el objetivo de estas fiestas era preparar, simbólicamente, a la población para el nacimiento de Cristo.

Entre los elementos distintivos de las posadas estaba el rezar rosarios, decir la letanía durante la procesión, cargar a los “peregrinos”, pedir posada y romper la piñata, un curioso objeto que llamaba la atención por sus colores y contenido.

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