UNAM forma perros para búsqueda y rescate de personas

Perros para búsqueda, de la UNAM
FB
TW
WA
Email
Telegram

En 1986 se creó en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Unidad Canina de Búsqueda y Rescate de Personas, la cual pertenece a la Dirección General de Análisis, Protección y Seguridad Universitaria (DGAPSU).

A esta unidad pertenecen Baco y Gala, dos pastor belga que en el sismo de 2017, ayudaron con su olfato para salvar la vida de las personas.

La unidad se creó por iniciativa de veterinarios universitarios a raíz de los sismos de 1985, ante la carencia de equipo especializado para atender y ayudar a personas atrapadas en escombros.

Julio Alejandro Velázquez Rodríguez, coordinador de la Unidad Canina indicó que la unidad: “Nace del requerimiento de ver que vinieron equipos caninos de otros países como Estados Unidos, Canadá, Suiza y Francia a apoyarnos; vieron que era eficiente, al principio se tenían carencias técnicas, pero se empezó a avanzar y la Universidad inició con esos primeros pasos”.

⇒LEER TAMBIÉN: Frida Sofía y Monchito, los personajes inventados en los sismos de 1985 y 2017

Actualmente la unidad K9 de la UNAM cuenta con 30 binomios, en su mayoría miembros de la comunidad universitaria y algunos externos.

De acuerdo con Julio Velázquez, se puede formar a un perro para esta labor desde cachorro, para que tenga varios años de vida operativa después de su certificación.

A las pocas semanas de nacido es posible iniciar estimulando sus patitas con toallitas de agua tibia, para continuar haciendo lo mismo en sus orejas y cola, el tiempo de estimulación es de unos pocos segundos para después regresarlos con su mamá.

Posteriormente, se inicia con algunos obstáculos y se les hace pasar por zonas obscuras o húmedas.

¿Quienes entrenan a los perros para búsqueda en la UNAM?

Los perros de búsqueda y rescate de la UNAM se entrenan para detectar personas atrapadas bajo los escombros de edificios colapsados.

En este lugar se capacita a voluntarios, quienes en su mayoría son estudiantes universitarios, y sus perros para formarlos como equipos especializados en detección de gente en dichas condiciones.

Entre las habilidades que adquieren están el desarrollo de destrezas físicas para los humanos en uso de equipo de ascenso y descenso, para realizar primeros auxilios caninos y humanos, hacer navegación terrestre, manejar mapas, brújulas y GPS para poder desenvolverse de la mejor forma en ambientes austeros.

Los caninos son entrenados para que mediante el olfato localicen e indiquen a su guía, a través de un ladrido o algún otro comportamiento, cuando una persona se encuentre atrapada entre los escombros. “Lo que el perro detecta es la concentración del CO2, su olfato es cincuenta veces más sensible que el nuestro”, explicó Julio Velázquez.

Eventos en los que han apoyado los perros para búsqueda de la UNAM

Con 12 años de edad, Baco y Gala son los veteranos del grupo, han ayudado a rescatar personas en México en los sismos de 2017, las explosiones de la Torre de Pemex en 2013, el hospital de Cuajimalpa en 2014 y el deslave del cerro del Chiquihuite en 2021. Aunque también apoyaron en la emergencia por el tsunami de 2011 en Japón.

La labor que realizan es imprescindible y, de hecho, los perros no sólo se dedican a detectar los puntos donde hay aroma de personas, ellos también hacen despeje de zonas. “Significa que los metes al sitio para verificar que efectivamente ya no haya alguien ahí, y se puede empezar a realizar la limpieza con la maquinaria”, explicó Julio.

A pesar de su edad, estos peludos no le tienen miedo ni a las alturas, entrenan cada sábado de las 8 a las 21 horas. Entre escombros, llantas, torres y bajadas de rapel estos caninos se preparan para ayudar, la mayoría son voluntarios que pertenecen a la comunidad universitaria de las facultades de Ciencias Políticas, Ingeniería y otras dependencias de la UNAM, pero también hay miembros del Instituto Politécnico Nacional y la Universidad Autónoma Metropolitana.

Cuánto tiempo dura el entrenamiento de un perro para búsqueda

Julio Velázquez comentó que alrededor del 80 por ciento de las unidades caninas del país han visitado el simulador de la UNAM para hacer más eficientes sus capacidades de rescate, entre ellos están: la Guardia Nacional, la Secretaría de la Defensa Nacional, la Secretaría de Marina, el equipo del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas de la Ciudad de México y distintos grupos de la Cruz Roja Mexicana.

El tiempo promedio para entrenar a un perro para búsqueda y rescate de personas es de dos años, pero para salir a operar necesita una certificación externa de la Organización Internacional de Perros de Rescate (IRO), título que sólo tienen los binomios de la UNAM.

La IRO es una red mundial de más de 115 organizaciones y 40 países bajo el aval de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y se especializa en temas de búsqueda y rescate con perros.

Esta certificación califica las habilidades de los trabajos de rastreo y de escombros, así como la obediencia y la destreza de los perros.

“Somos el primer equipo que sigue el protocolo internacional para certificar y el único que cuenta con el aval para organizar pruebas en el país. Estamos en un nivel de aspirantes a obtener certificación internacional”, resaltó Velázquez Rodríguez.

Tu lomito puede convertirse en un perro para búsqueda y rescate

Uno de los objetivos de la Unidad K9 de la UNAM es tener la mayor cantidad posible de perros certificados en todo el país y expandir las posibilidades que tiene esta casa de estudios como misión de difundir lo que hacen en este tema.

“Lo más importante que tiene el perro para dar es la posibilidad de ayudar a un ser humano para localizar a otro debajo de los escombros, lo que también amplía los vínculos que se forman entre nosotros”.

Entrenar a un perro en la Universidad Nacional para búsqueda y rescate de personas es posible, sólo es necesario expresar sus ganas de ayudar en cualquier emergencia y enviar un correo a la dirección [email protected] para entrar en un proceso de selección.

No hay requisitos rígidos ni hace falta tener una raza específica de cachorro, aunque se recomienda que sean de raza pequeña o mediana para que puedan entrar en espacios reducidos y sea posible cargarlos con las manos o un arnés.

Los grandes ayudan al rastreo o bien apoyan en la búsqueda en campo abierto, no son recomendables en edificios colapsados.

FB
TW
WA
Email
Telegram
Notas relacionadas
Hoy en Unión CDMX