El Museo de la Ciudad de México abrió Miradas a la ciudad: Espacio de reflexión urbana, su primer espacio expositivo permanente, un laboratorio para la reinterpretación del fenómeno urbano de la capital del país.
Integrada por piezas que incorporan nuevas tecnologías y espacios interactivos —como instalaciones audiovisuales con luz neón, videos y recorridos en 360 grados—, así como arte plástico, poesía, fotografía, mapas, carteles, textos y otros objetos artísticos, la exposición sobre la metrópoli reestrenará este nuevo espacio en la planta baja del Museo de la Ciudad, después del mantenimiento integral al recinto que se llevó a cabo en 2017.
La propuesta contó con la coordinación curatorial general de Mediapro Exhibitions, del Director del Museo, José María Espinasa y del antropólogo Alejandro Salafranca. Forma parte del interés de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México (SSCDMX) por devolverle al museo su vocación de entender la ciudad como un espacio que necesita de reflexiones, interpretaciones y soluciones constantes para sus problemas sociales, de servicio, vivienda e infraestructura, pero también para imaginar una ciudad futura.
En la primera sala, “La ciudad”, se aborda el fenómeno urbano global a través del tiempo, ejemplificado con imágenes y textos de distintas ciudades de la antigüedad desde su origen antropológico y su concepción filosófica hasta llegar a las ciudades contemporáneas y sus retos de presente y futuro en torno a la seguridad y la gestión del agua. El espacio fue curado por Mediapro Exhibitions y en el proyecto museográfico incorporó un audiopoema de la cantautora mexicana Amandititita.
La segunda sala,“La Cuenca del Anáhuac”—curada por el historiador César Moheno y el antropólogo Alejandro Salafranca—, es una la instalación, en un cubo oscuro, hecha con 200 neones sonorizados en la que se propone al espectador un recorrido sensorial histórico-poético desde el Cuicuilco milenario y la fundación de las ciudades lacustres nahuas, pasando por la Conquista, el Virreinato, la Reforma juarista, la Revolución Mexicana y otros momentos hasta llegar la Ciudad de México actual.
En la tercera sala,“Agua y ciudad”, Mediapro Exhibitions incorporó el audiovisual Retos para una CDMX sustentable, que aborda la problemática del agua en la Cuenca del Anáhuac como uno de los ítems trascendentales para asegurar la viabilidad y sustentabilidad de la urbe. La dirección de arte, ilustración y animación del video es de Francesc de Riba.
Con la curaduría de Arquine-Miquel Adrià, Andrea Griborio y Alejandro Hernández Gálvez, la sala “Arte, arquitectura y urbanismo” hace hincapié en el análisis y estudio del devenir arquitectónico de la ciudad, destacando un enorme mural con dos lados visuales, uno con la reproducción a detalle del óleo pintado por Luis Covarrubias sobre Tenochtitlán cuyo original está en el Museo Nacional de Antropología, mientras que en la cara adversa se muestra una vista panorámica de la urbe actual.
La Alameda Central, la Plaza de la Constitución, Ciudad Universitaria, la Biblioteca Vasconcelos, la Casa Estudio Luis Barragán, el Conjunto Urbano Nonoalco Tlatelolco, la Central de Abastos, el Metro de la Ciudad de México, la Basílica de Guadalupe y Cuiculco, entre otros, también son abordados en esta sala.
La quinta sala, “De Tenochtitlan a la Ciudad de México” ─con piezas populares como un árbol de la vida y nichos dedicados al luchador “El Santo” y las cantinas─, fue concebida por el caricaturista Rafael Barajas “El Fisgón”, y muestra por medio de instalaciones y objetos artísticos las distintas manifestaciones culturales, de religiosidad popular, festivas e identitarias que han dado una personalidad única a esta ciudad.
Curada también por “El Fisgón”, la sexta sala, “Ágora”, es un auditorio de usos múltiples que enriquece la infraestructura del museo al tiempo que es un espacio donde se muestran carteles de los diferentes movimientos sociales que han marcado a la ciudad en los últimos cien años, desde el periódico El Hijo del Ahuizote hasta las imágenes que representan la consigna “No más sangre”.
La séptima sala,“Palabrero”, es una video-instalación para cuatro pantallas del director de cine documental Everardo González, que muestra por medio de los sonidos de la ciudad la convivencia de millones de personas dentro de un mismo ámbito urbanístico.
Con la curaduría de Mediapro Exhibitions y la escritora Georgina Hidalgo Vivas, en la última sala, “Espacio público”, se presenta una instalación que mediante el documental biográfico y la fotografía refleja los espacios compartidos de convivencia y a la vez personaliza a los habitantes de esta ciudad, con su enorme diversidad de personajes y oficios, como los que venden “chácharas”, los que “hacen limpias”, los taqueros y mariachis, los migrantes, los estudiantes, los policías, los comerciantes, entre otros.
De manera interactiva, los visitantes podrán hacer al final del recorrido un viaje de 360 grados a las grandes manifestaciones en el espacio público de la urbe como la celebración del Día de Muertos en Mixquic, al Estadio Azteca, a una marcha de protesta, al Mercado de la Nueva Viga o a la Basílica de Guadalupe.