Para un perro, un hueso puede ser el objeto del deseo, pues ellos necesitan algo para morder y divertir sus dientes.
A algunos les compran huesos de juguete o sintéticos para que se entretengan, sin embargo a este amigo cuadrúpedo le jugaron una mala pasada al comprarle un tazón que en el fondo tenía pintado un gran hueso.
Al tener agua el recipiente, el efecto hace parecer que dentro se mueve un hueso, que cualquier can desearía tener entre sus mandíbulas.
El video resulta divertido al observar como el ingenua animal trata de sacar un enorme hueso que en realidad sólo es una imagen.
Con información de Daily Mail